Un antiguo arte marcial chino ayuda a los enfermos de Parkinson. La práctica diaria del tai-chi, una disciplina que implica movimientos lentos y fluidos combinados con una respiración controlada, permite a los enfermos aumentar y mejorar su equilibrio, reduciendo así las peligrosas caídas. “Por supuesto, aún queda mucho por investigar para curar este trastorno, pero en comparación con hace 15 años, los pacientes pueden ser más independientes en su vida diaria”, declaró el Dr. Wolfgang Oertel, presidente de la Sociedad Neurológica Alemana, con motivo del Día Mundial del Parkinson, que se celebra cada año el 11 de abril. En Alemania, más de 250.000 personas padecen la enfermedad; por término medio, se diagnostica en torno a los 60 años, pero hay un buen 10% de casos en los que la enfermedad ya aparece entre los 20 y los 40 años. El número de pacientes alemanes está aumentando, dado el envejecimiento de la población; y junto a las terapias farmacológicas, la fisioterapia diaria para mantener las habilidades cotidianas es esencial para ellos.