En el artículo “El uso del Tai Chi como modalidad de movimiento en ortopedia” (edición de septiembre de 2000 de Medicina Complementaria) leemos:
El uso de Taijiquan en enfermedades ortopédicas y musculoesqueléticas es una alternativa terapéutica que puede mejorar enormemente la práctica de la fisioterapia ortopédica. Es una forma de ejercicio que reconoce la conexión mente/cuerpo. Los movimientos son elegantes y controlados, cubriendo todo el arco de movimiento de cada articulación. No hay impacto en las articulaciones en sí. La cadencia lenta y rítmica se coordina con la respiración. Los movimientos movilizan todas las respuestas posturales y desafían los sentidos propioceptivos. Las maniobras de los tobillos y las caderas para mantener el equilibrio se facilitan continuamente.

La práctica de Taijiquan tiene un efecto positivo en la flexibilidad, la fuerza muscular, la tensión muscular y la postura. En teoría, también tiene el potencial de aumentar la masa ósea. En general, los efectos beneficiosos del Taijiquan para la salud musculoesquelética parecen notables.

Entre las recomendaciones publicadas en el Journal of the American Geriatrics Society por las sociedades geriátricas británica y estadounidense, el Taijiquan está indicado como el non plus ultra de los ejercicios porque los movimientos son extremadamente lentos y medidos y enfocados precisamente en el equilibrio, especificando que con una correcta serie de ejercicios las caídas en los ancianos pueden reducirse en un 55 por ciento.

Artrita – Un estudio en la Universidad de Tufts, presentado en octubre de 2008 en una reunión del Colegio Americano de Reumatología, mostró que una hora de Taijiquan dos veces por semana durante 12 semanas redujo el dolor y mejoró el estado de ánimo y la función física más que los ejercicios de estiramiento estándar en pacientes con osteoartritis severa en la rodilla.

Según un estudio publicado en diciembre de 2008 en Evidence-based Complementary and Alternative Medicine, un curso de ocho semanas de Taijiquan seguido de ocho semanas de entrenamiento en el hogar mejoró significativamente la flexibilidad y ralentizó la progresión de la enfermedad en pacientes con espondilosis anquilosante.

Densidad ósea: un análisis de seis estudios realizados por el Dr. Wayne y otros investigadores de Harvard indica que el Taijiquan puede ser una forma segura y efectiva de mantener la densidad ósea en mujeres posmenopáusicas.

El entrenamiento de Taijiquan consiste en movimientos lentos, fluidos e interconectados, en busca de una armonía que involucre a todo el cuerpo en cada movimiento. Además, el énfasis en el Taijiquan en la postura correcta enseña al cuerpo cómo absorber y descargar adecuadamente tanto la presión debido al peso del cuerpo en sí como la presión debida a fuentes externas.

Tomado de: officina della salute.